Un grave hecho de violencia ocurrió este jueves alrededor de las 8.30 de la mañana en la intersección de Pje. Neuquén y 1º de Mayo, en el barrio Parque Industrial de Fontana, donde un hombre fue apuñalado mientras se encontraba aprehendido dentro de un móvil policial.
Según informaron fuentes policiales, un grupo de vecinos demoró a un hombre de 27 años, identificado como Portillo, dentro de un domicilio tras acusarlo de haber intentado cometer un robo. El hecho habría ocurrido en la vivienda de la señora Rivero, quien ya habría sido víctima de hechos delictivos anteriores.
Ante el llamado al 911, personal policial acudió al lugar y procedió a la aprehensión del sospechoso, encontrando a unas 15 personas aproximadamente en el sitio. Los presentes manifestaron que Portillo habría intentado ingresar al domicilio con fines delictivos, por lo que familiares y vecinos se movilizaron hasta el lugar y lograron reducirlo antes de que concretara el ingreso.
Una vez esposado, el individuo fue subido a la parte trasera de un móvil policial, quedando bajo custodia. Sin embargo, y tal como se observa en un video que circula, por un descuido del personal policial se abrió la puerta trasera derecha del patrullero, momento en el cual una persona no identificada ingresó y apuñaló al detenido dentro del vehículo.
Tras el ataque, el chofer del móvil habría incurrido en una serie de irregularidades, las cuales serán analizadas por las autoridades competentes en el marco de la investigación en curso.
El hecho vuelve a poner en evidencia el alto nivel de tensión social en contextos de inseguridad, donde la ciudadanía expresa su hartazgo ante la falta de respuestas judiciales. Según trascendió, el detenido poseería al menos 23 causas penales abiertas, situación que generó indignación entre los vecinos.
Desde distintos sectores remarcan que el personal policial no puede relajarse ante escenarios de exaltación social, aunque también señalan que el problema de fondo responde a la reiterada liberación de personas con múltiples antecedentes, lo que profundiza el malestar y la desconfianza en el sistema judicial.
La investigación continúa para determinar responsabilidades tanto por el ataque como por las fallas en el procedimiento de custodia.
Se espera que no Intervenga ningún organismo de Derechos Humanos atento a que quedó evidenciado en las imágenes el grado de violencia entre grupos y que el personal policial actuó según sus instintos
